Lo correcto no es prohibir la venta del libro de Angelita Trujillo, porque ¿y entonces donde dejamos el derecho ala libre expresión individual?

NOTA: La foto arriba no corresponde ala portada ni contenido del libro de Agelita Trujillo.

No podemos prohibir la venta del libro de (Angelita) Trujillo, hija del tirano Rafael Leonidas Trujillo porque con esto no se evita que el mismo no sea leído, pero el que no lo quiera que no lo compre y así contribuye con una buena causa

Lea despacio, con inteligencia y prudencia, y antes de terminar entenderás el título y asta el final sin terminar de leer todo el texto aquí expuesto.

No podemos prohibir de forma categórica, que el libro de María de los Ángeles (Angelita) no sea vendido, ahora bien, si podemos contribuir a que el mismo no tenga éxito mercado lógico, si nos limitamos ha comprarlo. Pues recordemos que el ajusticiamiento del tirano Rafael Leonidas Trujillo, qué gobernó a sangre y fuego al pueblo dominicano desde 1930 a 1961. Fue precisamente por eso mismo, para que todos los dominicanos tuviéramos hoy y por siempre democracia y libertad de libre expresión.

Por lo tanto no podemos convertirnos en fariseos, en querer hacer cumplir la ley, hacer la “ley” pero nosotros mismo no cumplirla. Cierto, y claro estas, no podemos darle honor a una obra o libro que hable bien de un ladrón, un violador, un tirano, un satánico, un etc. no podemos jamás darle el honor de la gratitud. No!. Pero si queremos libertad de expresión, debemos dejar que los demás se expresen aunque nunca estemos de acuerdo con ellos.

y es muy cierto, el libro puedes ser una ofensiva ala sensibilidad(y de hecho lo es) tanto a todo el pueblo dominicano, como halos familiares y amigos que sufrieron en carne propia la sanguinaria y psicológica tiranía de ese cruel dictador llamado “Trujillo”.

También tenemos que tener presente, el hecho que de prohibir el libro, pues este hecho provocaría una curiosidad casi colectiva por el contenido total de dicho libro. Lo cual haría que el mismo tuviera un éxito en ventas, puesto que al ser prohibido su venta, la gente que no lo ha leído, trataría de comprarlo por cualquier medio, ya sea por Internet, etc. procurando percatarse por si mismo, de lo que realmente dice el libro en si, ya sea para comentarlo, analizarlo, y un etcétera mas de cosas.

Lo mas correcto seria que la gran mayoría no lo compre, no se le de publicidad (algo un poco imposible, pues el solo hecho de comentarlo, es publicidad indirecta). En conclusión, es no valorar este libro como algo importante, si no como un libro más.